Cuando hablamos de compliance, muchas veces lo hacemos refiriéndonos al cumplimiento normativo con carácter general, sin embargo, y si sois lectores habituales de este blog, sabréis que, al igual que existen diferentes normas y leyes, el compliance también puede dividirse en diferentes tipos, haciéndose más específico en función de la actividad de la empresa, de las leyes particulares que le son de aplicación, etc. Por ello, en este artículo hacemos un repaso de los principales tipos de compliance que se pueden aplicar en las empresas.
En este artículo hablamos de:
¿Cuántos tipos de compliance hay?
Dar un número exacto de cuántos tipos de compliance hay no es posible, porque en realidad, el compliance puede dividirse en tantos tipos de modelos de cumplimiento normativo, como normativas hay para las empresas y organizaciones. Sin embargo, sí que es cierto que podemos hablar de los principales tipos de compliance que podemos encontrar tanto en España como internacionalmente, ya que hay una serie de marcos regulatorios que son de aplicación en prácticamente todas las empresas y otras normas y leyes sectoriales, cuyo adecuado cumplimiento es esencial no solo para evitar posibles sanciones, sino también para llevar un mejor control de los procesos y procedimientos de la propia empresa.
Por lo tanto, a la hora de hablar de tipos de compliance, podemos hacer dos diferenciaciones: sistemas o modelos de compliance genéricos y sistemas o modelos de compliance específicos.
Sistemas de compliance genéricos
Los sistemas de compliance genéricos son sistemas transversales, a través de los cuales se puede implantar un plan de cumplimiento normativo general en cualquier tipo de empresa u organización e integrar en él sistemas de compliance específicos.
Estos sistemas de compliance genéricos, a los que también podemos referirnos como sistemas de compliance legal, tienen su máxima expresión en la norma ISO 37301 de Sistemas de gestión de compliance, que es, además, el estándar certificable y de carácter transversal.
Cualquier empresa u organización que considere implementar un plan de compliance, puede recurrir como punto de partida a estos sistemas o modelos de compliance genéricos, ya que a través de ellos se gestiona el cumplimiento normativo general de la empresa, al que se pueden ir integrando planes de compliance más específicos si es necesario.
Sistemas de compliance específicos
Los sistemas de compliance específicos permiten a las empresas implantar planes de cumplimiento centrados en determinadas normas o leyes que les afectan directamente, algunas de estas son de aplicación en todas las empresas, pero otras son específicas de determinados sectores. Así, podemos distinguir entre los siguientes tipos de compliance específicos:
- Corporate compliance: Es el cumplimiento de las normas y códigos internos de las compañías, como, por ejemplo, el código ético o los protocolos adoptados por estas.
- Compliance penal: Se refiere a los programas de prevención de la comisión de delitos penales en el seno de la empresa, bien por esta en su conjunto o bien por sus empleados o directivos.
- Compliance laboral: Engloba el cumplimiento normativo respecto a los trabajadores y las normas laborales, de manera que gira en torno a la prevención de riesgos laborales, las políticas de contratación, la promoción interna, la conciliación, etc.
- Compliance financiero: Contempla toda la normativa aplicable al sector financiero y encaminada a prevenir fraudes, estafas, actividades que puedan poner en riesgo al mercado, la libre competencia o el desarrollo de actividades financieras de manera transparente. Dentro del compliance financiero, por ejemplo, está la prevención del blanqueo de capitales.
- Compliance ambiental: Recoge todas las normativas medioambientales y es uno de los modelos de compliance que está cobrando cada vez más relevancia.
- Compliance tributario: Este tipo de compliance tiene como objetivo el cumplimiento de las leyes en materia tributaria, pero también la prevención de los riesgos derivados de su incumplimiento.
- Compliance deportivo: Se centra en la gestión del cumplimiento de la normativa deportiva, tanto a nivel estatal como autonómico, además de otras leyes que también son de aplicación en las entidades deportivas. Es especialmente importante para las entidades deportivas que tienen consideración de persona jurídica, porque de los delitos cometidos por sus miembros, pueden tener responsabilidad penal.
- IT Compliance: Se refiere al cumplimiento de todas aquellas obligaciones legales derivadas de normas sobre seguridad de la información, tanto externas como internas, pero también al uso de las nuevas tecnologías para el cumplimiento del compliance. El IT compliance también puede dividirse en áreas más específicas, como el compliance en ciberseguridad o el web compliance.
- Web compliance: Se trata del cumplimiento de las diferentes normativas y requisitos legales que afectan a las páginas web, como la normativa de protección de datos o la LSSI-CE.
Estos son los principales tipos de compliance específicos, pero no los únicos, puesto que, cómo hemos mencionado, se pueden crear modelos o sistemas de compliance para gestionar el cumplimiento de diversas normativas, de manera que también podríamos hablar de:
- Compliance en materia de seguridad alimentaria
- Compliance en materia de propiedad intelectual
- Compliance mercantil
- Compliance en materia de exportación
- Compliance en materia de salud pública
Por citar algunos ejemplos.
Lo que sí tienen en común todos estos sistemas o modelos de compliance, es que deben integrar un sistema de compliance disciplinario, es decir, deben especificar las consecuencias y medidas disciplinarias que puede adoptar la empresa en caso de que sus miembros incumplan la normativa interna o realicen acciones o actividades de carácter infractor o delictivo. Dichas medidas disciplinarias deberán estar dentro de los límites que marca la ley.
¿Qué tipo de compliance necesita mi empresa?
Cualquier empresa que quiera evitar riesgos de incumplimiento normativo, debe, como mínimo, implantar un sistema de compliance genérico. Así mismo, y dado que en España tener implantado un programa de prevención de delitos penales en la empresa, puede contribuir a atenuar o eximir de responsabilidad penal a la misma en los delitos cometidos por sus miembros, también se debe considerar un plan de compliance penal.
Adoptar otros modelos de compliance específicos dependerá del sector de actividad de tu empresa y los riesgos legales a los que pueda estar expuesta.
En Grupo Atico34 te ayudamos a elaborar e implantar el plan de compliance más adecuado para tu empresa, en base a las normas que le sean de aplicación por su actividad, sus características y los riesgos de incumplimiento a los que su actividad la expone. Ponte en contacto con nosotros para recibir más información.