¿Cuál es la importancia de la igualdad de género en las empresas? ¿Cómo se logra y fomenta la igualdad de género en las organizaciones? En las próximas líneas responderemos a estas y otras preguntas al respecto del papel que juega la igualdad de género en las empresas.
En este artículo hablamos de:
¿Qué es la igualdad de género en la empresa?
La igualdad de género en empresas supone que mujeres y hombres tengan los mismos derechos, responsabilidades y oportunidades dentro de las mismas, es decir, que ambos puedan acceder al empleo, mantenerlo y mejorar su carrera profesional y sus posibilidades de promoción en las mismas condiciones, algo que para las mujeres todavía no es una realidad, tal y como indican diferentes estudios e informes de organismos internacionales sobre la desigualdad de género en el mundo.
Es importante señalar que, pese a lo que se pueda creer y entender a veces por igualdad, la igualdad de género en el trabajo no significa que haya contratado en las empresas el mismo número de mujeres y hombres, sino que tiene que ver con las condiciones en cómo acceden y se mantienen el empleo ambos sexos. También se refiere a la igualdad salarial, es decir, que hombres y mujeres cobren lo mismo por trabajos iguales o de igual valor.
De acuerdo a la Organización Internacional del Trabajo (OIT), podemos hablar de igualdad de género en las empresas, cuando estas cuentan con los siguientes elementos:
- Igualdad de oportunidades y trato en el empleo.
- Mismas oportunidades para el desarrollo profesional.
- Igual remuneración por trabajo igual o de igual valor.
- Mismas condiciones de seguridad en el trabajo y de acceso a seguridad social.
- Mismo nivel de participación en la toma de decisiones en todos los niveles de la empresa.
- Mismas oportunidades para la sindicalización y la presencia en la negociación colectiva.
- Fomento de la corresponsabilidad y mismas condiciones de flexibilidad laboral para la conciliación de la vida laboral y familiar para mujeres y hombres.
¿Cómo se logra la igualdad de género en la empresa?
Conseguir alcanzar los objetivos de la igualdad de género en la sociedad y por extensión en las empresas, es algo que depende de varios actores, como el Estado, a través de las instituciones y las leyes en fomento y promoción de la igualdad de género, y las propias empresas a la hora no solo de cumplir con estas leyes, sino también para mostrar un compromiso real con la igualdad de género, un elemento que cada vez tiene más peso en los denominados criterios ESG de las empresas (factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo).
Así, para lograr la igualdad de género en la empresa, es necesario que estas cumplan con ese mandato legal, y no solo cuando tienen obligación de hacerlo, como es el caso del plan de igualdad de empresas de más de 50 personas trabajadoras, sino también cuando esa obligación no existe, fomentando la igualdad de oportunidades y trato entre mujeres y hombres en todos sus niveles, desde la dirección hasta los empleados, mostrando un compromiso que debe ser real y tomar forma, por ejemplo, en una serie de buenas prácticas para integrar la igualdad de género en las empresas.
La formación, concienciación y sensibilización en materia de igualdad de género en las empresas también juega un papel importante en la consecución de la igualdad, como lo es la inclusión de más mujeres en aquellos departamentos en las que estén infrarrepresentadas, así como en los puestos de responsabilidad y toma de decisiones de la compañía, puesto que se integrará también su punto de vista.
¿Por qué es importante que la igualdad de género se instaure en las empresas?
Aparte de evitar sanciones por incumplimiento de la normativa en materia de igualdad de género (por ejemplo, no cumplir con la obligación del plan de igualdad puede suponer multas de entre 751 a 7.500 euros), diversos estudios han puesto de manifiesto que el fomento de la igualdad de género en las empresas y la aplicación de medidas que la favorezcan, aportan una serie de beneficios a estas, además de a los propios países; organismos como el Foro Económico Mundial o la OCDE estiman que la incorporación completa de la mujer al mercado laboral aumentaría significativamente el PIB de los países.
La igualdad de género puede aportar a las empresas:
- Mayor conocimiento de la organización y de sus recursos humanos, lo que permite una mejor gestión de los mismos.
- Ayuda a aprovechar el talento y potencial de toda la plantilla, sin distinciones.
- Mejora la motivación, la productividad y la dedicación de los trabajadores.
- Mejora el clima laboral.
- Ayuda a atraer el talento y retenerlo.
- Permite acceder a contratos con el sector público.
- Mejora la imagen de la empresa y consolida la igualdad como un objetivo y valor real de la misma.
- Facilita el acceso a distintivos de calidad, así como a subvenciones.
- Mejora la competitividad.
¿Cómo fomentar la igualdad de género en la empresa?
El primer paso para fomentar la igualdad de género en la empresa es conocer el punto desde el que se parte, para lo que es recomendable realizar un cuestionario de igualdad de género o, en caso de tener que hacer el plan de igualdad, elaborar el diagnóstico de situación. De los datos obtenidos, la empresa podrá saber en qué áreas necesita mejorar y qué medidas puede aplicar para ello.
Algunas de esas medidas o acciones que se pueden llevar a cabo para fomentar la igualdad de género en las empresas son:
- Elaboración e implantación de un plan de igualdad (se tenga o no la obligación de hacerlo).
- Formación de la plantilla en materia de igualdad y concienciación sobre comportamientos sexistas y acoso sexual.
- Perseguir y castigar cualquier tipo de acoso sexual o por razón de sexo.
- Determinar la existencia de una posible brecha salarial a través de una auditoría retributiva y diseñar acciones para eliminarla.
- Fomentar la corresponsabilidad y facilitar la conciliación familiar y laboral (informando tanto a mujeres y a hombres de estas políticas).
- Asegurarse de que los cursos de formación son accesibles a toda la plantilla, colocándolos en franjas horarias en la que tanto hombres como mujeres puedan asistir.
- Fomentar el liderazgo femenino con programas de formación para las mujeres de la empresa (especialmente en aquellas organizaciones en las que la presencia de la mujer en cargos directivos o de responsabilidad sea poca o nula).
Finalmente, es importante señalar que cualquier diseño y aplicación de medidas para fomentar la igualdad de género en las empresas, debe hacerse aplicando la perspectiva de género, puesto que de otra forma no se estarían teniendo en cuenta las particularidades y necesidades de mujeres y hombres, que no son siempre coincidentes.