Las amenazas de ciberseguridad que enfrentan las empresas son cada vez más sofisticadas y complejas, lo que provoca que la prevención de este tipo de ataques se haya convertido en una tarea esencial para muchas compañías, especialmente aquellas que dependen más del uso de equipos y sistemas informáticos y de la Red. Una de las mejores soluciones de ciberseguridad para este tipo de empresas es la implantación de un centro de operaciones de seguridad (SOC).
En este artículo explicaremos qué es y para qué sirve un SOC y cuáles son los beneficios que puede aportar a una empresa su implantación.
En este artículo hablamos de:
¿Qué es un centro de operaciones (SOC)?
Un centro de operaciones de seguridad o SOC, cuyo significado en inglés es Security Operations Center, es la plataforma formada por un equipo de expertos en ciberseguridad encargados de garantizar la seguridad de la información y los sistemas informáticos de una organización, para lo que emplean diferentes herramientas de monitoreo, seguimiento y análisis.
Podemos decir que un SOC, por lo tanto, es un centro de operaciones de ciberseguridad encargado de asegurar la ciberresilencia de los sistemas informáticos de una organización, desde una perspectiva, sobre todo, proactiva, pero también reactiva.
¿Cuáles son las funciones del centro de operaciones de seguridad?
La seguridad en Internet y la seguridad de sistemas y redes informáticas es uno de los objetivos fundamentales de cualquier centro de operaciones de seguridad, para poder así adelantarse a los ataques antes de que estos ocurran y, en caso de que una amenaza se materialice, poder responder de la forma más rápida posible para solucionarla.
Así, entre las principales funciones de un SOC tenemos:
- Detección, análisis y corrección de problemas e incidentes de seguridad en los sistemas informáticos.
- Supervisión y análisis de las actividades en redes, servidores, terminales, bases de datos, aplicaciones, sitios web y en cualquier otro sistema en busca de actividades o comportamientos sospechosos o anomalías, así como vulnerabilidades que puedan poner en riesgo la seguridad del sistema y de la información.
- Respuesta y defensa de ataques.
- Registro e investigación de todos los incidentes de seguridad que hayan ocurrido.
- Recuperación de la información perdida o dañada en un ataque, empleando para ello centros de respaldo.
- También pueden realizar tareas de criptoanálisis y de ingeniería inversa sobre el malware empleado por los ciberdelincuentes para atacar el sistema.
¿Cómo funciona un SOC?
Para establecer un centro de operaciones de seguridad, primero es necesario alinear la estrategia de ciberseguridad con los objetivos de la empresa y sus diferentes departamentos, puesto que no se debe perder de vista el enfoque empresarial. Definido el enfoque, se debe crear la estructura necesaria para darle soporte.
Esta estructura contará con diferentes herramientas para reforzar la seguridad del sistema y permitir el monitoreo y análisis de todos los incidentes de seguridad. Entre las herramientas o soluciones de seguridad que pueden encontrarse en un SOC tenemos firewall, un sistema de gestión de eventos e información de seguridad (SIEM), un IPS (sistema de prevención de intrusiones), un IDS (sistema de detección de intrusiones), sistemas EDR, entre otras, así como la tecnología y herramientas necesarias para poder llevar a cabo el registro, análisis, interpretación y correlación de los datos obtenidos de los incidentes de seguridad (tanto evitados como ocurridos), que son algunas de las características de un centro de procesado de datos.
En lo que a recursos humanos se refiere, el SOC está formado por un equipo de analistas de alertas y profesionales altamente capacitados en ciberseguridad.
Funciones del centro de operaciones de seguridad
Para conseguir cumplir con sus objetivos, el equipo del centro de operaciones realiza diferentes funciones y tareas que conforman tanto su metodología de trabajo como la estrategia a seguir:
- Define las herramientas y tecnología que necesita y tiene a su disposición para hacer frente a los ciberataques y ciberamenazas que se puedan producir. Los miembros del SOC deberán tener un amplio dominio de estas herramientas y determinar si necesitan incorporar nuevas soluciones de ciberseguridad.
- Monitorización proactiva de todos los sistemas que conforman la infraestructura informática de la organización, para poder detectar las amenazas antes de que estas se materialicen y comprometan parte o todo el sistema.
- Registro y clasificación de las alertas recibidas, para elaborar con ello una base de datos donde las amenazas se clasificarán según su tipología, gravedad o los métodos empleados para eliminarlas. De manera que se irá construyendo un completo registro de todos los incidentes de seguridad detectados, evitados y/o solucionados.
- Mejora continua de las defensas, para poder detectar y solucionar vulnerabilidades del sistema, tanto externas como internas.
- Asegurar el cumplimiento de las normativas vigentes en materia de ciberseguridad, seguridad de la información y protección de datos.
Beneficios de contar con un SOC
Contar con un SOC tiene, por tanto, entre otras ventajas:
- La prevención de intentos de intrusión y ciberataques.
- Proteger la información y los datos confidenciales.
- Dar una respuesta rápida ante brechas o incidentes de seguridad.
- Analizar amenazas y ataques para establecer nuevas medidas preventivas con las que evitarlas en el futuro.
- Detección temprana de intentos de intrusión.
- Cumplir con diferentes normativas en ciberseguridad y protección de datos.
Organización del SOC
El centro de operaciones de seguridad se organiza en tres niveles de acuerdo al grado de especialización de los analistas que forman parte de cada uno de ellos, de manera que tenemos la siguiente estructura y funciones:
- El nivel 1 corresponde a los analistas de alertas, estos se encargan, con ayuda de las herramientas del SOC, de monitorizar en tiempo real y de manera continua las alertas que se reciben en el sistema. Evalúan dichas alertas y si estas alcanzan el nivel de riesgo establecido, se escalan al siguiente nivel.
- En el nivel 2 los analistas se encargan de determinar si el sistema o la información han sido afectados y, en caso afirmativo, recomendarán una respuesta al incidente, pasando al siguiente nivel.
- En el nivel 3, profesionales altamente cualificados en ciberseguridad, se ocupan de dar respuesta a los incidentes producidos y solucionarlos, además de ofrecer nuevas medidas o herramientas para prevenirlos en el futuro.
La formación especializada de los miembros del SOC es fundamental para que este pueda cumplir con sus funciones de forma correcta, lo que en muchas ocasiones lleva a las empresas a contratar los servicios de un SOC externo, que cuente tanto con este tipo de profesionales como con las herramientas necesarias para desempeñar su labor.
¿Por qué debes considerar tener un SOC para tu empresa?
Como dijimos en la introducción de este artículo, los ciberamenazas son una realidad con las que las empresas deben lidiar a diario y los ciberataques se vuelven cada vez más complejos y sofisticados, por lo que en muchas ocasiones las herramientas o soluciones de ciberseguridad más tradicionales se quedan cortas para darles respuesta. Además, la clave de una buena defensa está no en dar respuesta al ataque y solucionar los daños causados, sino en prevenirlos y evitar que se produzcan, y es aquí donde el centro de operaciones de seguridad destaca.
El SOC ofrece no solo un equipo de respuesta, sino un equipo encargado de monitorear en tiempo real todo el sistema, detectando posibles amenazas y vulnerabilidades antes, incluso, de que se conviertan en un problema. Y cuando se convierten en un problema, ofrecen una respuesta más rápida para hacerles frente y poder recuperar la normalidad lo antes posible.