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Compliance

Identifica los tipos de publicidad engañosa con 5 ejemplos

En su afán por destacar sobre la competencia, muchas marcas caen en el error de ofrecer publicidad engañosa sobre sus productos y servicios. Pero, ¿en qué consiste esta publicidad falsa? En este artículo te lo contamos y te mostramos cinco ejemplos de empresas que han caído en estas malas prácticas.

¿Qué es la publicidad engañosa o falsa?

La definición de publicidad engañosa sería “aquella que presenta afirmaciones falsas sobre los productos o servicios que promociona, con la intención de afectar al comportamiento de los consumidores“.

También se puede considerar publicidad falsa aquella que omite datos fundamentales sobre los productos o servicios que se anuncian, evitando así que los consumidores cuenten con información completa y veraz.

¿Cuándo se considera que la publicidad es engañosa?

La mayoría de las empresas adornan sus productos o exageran sus virtudes con el objetivo de convencer a los consumidores. Sin embargo, hay una diferencia entre ensalzar las características de un producto o directamente mentir sobre las mismas.

Las afirmaciones falsas o la omisión de datos fundamentales sobre el producto o servicio son prácticas destinadas a engañar al consumidor. Por tanto, se puede decir que la publicidad engañosa es aquella que, de forma consciente, presenta datos o afirmaciones que puedan inducir a error a los usuarios.

Objetivos de los anuncios engañosos

El objetivo de la publicidad engañosa es aumentar las ventas de un determinado producto o servicio mediante el engaño al consumidor. Para ello, se presenta el producto aludiendo a determinadas características que no concuerdan con la realidad, o se omiten datos importantes que el destinatario debe conocer.

De esta manera, se presenta una descripción del producto o servicio muy alejada de la realidad, que llama la atención del consumidor, pero que a la hora de la verdad, resulta no ser cierta. Por tanto, la publicidad engañosa es una estafa, ya que se miente y manipula a los destinatarios a través de la mentira y el engaño.

Formas de publicidad ilícita

Existen numerosos tipos de publicidad engañosa, y son muchas las maneras en que las empresas y marcas pueden aplicar esta conducta ilícita:

  • Mensajes y expresiones ambiguas que provocan que el destinatario pueda interpretar su significado en un sentido equivocado.
  • Ocultar información importante, por ejemplo sobrecostes o cláusulas adicionales.
  • Mentir sobre las características del servicio o los beneficios que aporta.
  • Ensalzar las características del producto aludiendo a estudios falsos o con datos manipulados.
  • Mostrar imágenes del producto que no se corresponden con su apariencia real.
  • Ofrecer un producto o servicio a un precio determinado a sabiendas de que no se cuenta con existencias para atender la demanda.
  • Promociones, sorteos o concursos en los que no se ofrezcan los premios prometidos.
  • Aludir a errores tipográficos en el precio del producto, con la intención de venderlo a un precio superior al ofertado.
  • Incitar a que el consumidor relacione el producto con una marca determinada, por ejemplo una empresa de reconocido prestigio, cuando en realidad no pertenece a ella.
  • Afirmar que la marca está adherida a un determinado código de conducta cuando es falso.
  • Anunciar un producto con palabras como “gratis”, “regalo” o “a coste cero”, cuando en realidad el consumidor va a tener que abonar dinero por él.
  • Decir que el producto estará disponible solo durante un período muy breve de tiempo para dar carácter de urgencia a la compra, cuando esto sea mentira.

El greenwashing o publicidad verde fraudulenta

En los últimos tiempos se está dando un nuevo fenómeno llamado greenwashing o publicidad verde engañosa.

Hoy en día, resulta de suma importancia la responsabilidad corporativa de una empresa, y para ello muchas desarrollan productos o proyectos relacionados con el cuidado del medio ambiente.

Esto ha dado lugar al greenwashing, que es un término empleado para definir las malas prácticas de las empresas a la hora de presentar un producto ecológico o respetuoso con el medio ambiente.

Básicamente, la publicidad verde engañosa trata de engañar al consumidor aludiendo a que el producto presenta ciertas características que lo hace responsable con el medio ambiente y el desarrollo sostenible, cuando esto no es así.

Ejemplos de publicidad engañosa

Hay gran cantidad de marcas muy conocidas que realizan publicidad engañosa. En muchas ocasiones ni siquiera se han tenido que enfrentar a consecuencias legales, pero hay otros casos en los que sí se les han aplicado sanciones.

McDonald’s

La publicidad engañosa en McDonalds es evidente para todo el mundo. Esta cadena de comida rápida presenta en los anuncios de los medios de comunicación o en las imágenes de sus establecimientos productos que nada se corresponden con la realidad. Seguro que tú también has ido a comer una de esas apetecibles hamburguesas que te “vende” McDonald’s, pero cuando te la han entregado cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Hemos puesto como ejemplo a McDonald`s, pero es una práctica común en la mayoría de cadenas de comida rápida.

Font-Vella

Uno de los casos de publicidad engañosa en España tuvo como protagonista a la empresa Font Vella. En 2010, la marca difundió un anuncio en los medios de comunicación en el que promocionaba una garrafa de agua ecoligera. En el spot, una voz en off afirmada que era “la primera hecha con plástico reciclado“.

Sin embargo, la organización de consumidores de Cataluña elevó una reclamación ya que el mensaje podía dar a entender que el producto estaba fabricado íntegramente con plástico reciclado. Sin embargo, un estudio posterior determinó que el producto solo contenía un 25% de este material.

Volkswagen

Volkswagen fue protagonista de uno de los grandes escándalos recientes en el mundo de la automoción. La marca alemana anunciaba que sus vehículos tenían unos niveles de emisiones de gases contaminantes muy bajos. Sin embargo, se descubrió que habían instalado un software para distorsionar los resultados en los controles medioambientales y que, en realidad, las emisiones de sus vehículos eran 40 veces superiores a lo que afirmaban.

Nutella

La publicidad engañosa en alimentos también es muy frecuente. La marca Nutella fue sancionada con una multa de tres millones de euros por un anuncio en el que afirmaban que un bocadillo de Nutella era un desayuno equilibrado y saludable para los niños. Sin embargo, posteriormente se descubrió que sus productos superaban ampliamente las calorías permitidas.

Coca-Cola

Cola-Cola también ha sido objeto de muchas denuncias por publicidad engañosa. Una de estas ocasiones se debió al lanzamiento de una campaña publicitaria en la que la marca afirmaba que las calorías que contiene una lata de Coca-Cola se podían quemar bailando 10 minutos o riendo 75 segundos, lo cual, naturalmente, era falso.

Otros tipos de publicidad prohibidos

La publicidad engañosa es uno de los tipos de publicidad prohibida que existen, pero también hay otros:

  • Publicidad ilícita: es aquella que vulnera los derechos reconocidos en la Constitución o en la Declaración de los Derechos Humanos, especialmente cuando se trata de los derechos de los menores.
  • Publicidad desleal: se refiere a aquella publicidad cuyo objetivo es denigrar, menospreciar o menoscabar los productos o reputación de la competencia.
  • Publicidad subliminal: presenta información sobre productos o servicios de forma tan sutil que no se percibe de forma consciente. Por ejemplo, la inserción de imágenes en un anuncio televisivo que sean tan breves que el ojo humano no las pueda percibir conscientemente.
  • Publicidad encubierta: se produce cuando los medios de comunicación usan la publicidad camuflada en espacios destinados a otro tipo de contenidos.

Sanciones por publicidad engañosa

Las sanciones por publicidad engañosa en España se recogen en el artículo 282 del Código Penal. En dicho artículo se establecen “penas de prisión de 6 meses a 1 año o multa de 12 a 24 meses a los fabricantes o comerciantes que, en sus ofertas o publicidad de productos o servicios, hagan alegaciones falsas o manifiesten características inciertas sobre los mismos, de modo que puedan causar un perjuicio grave y manifiesto a los consumidores, sin perjuicio de la pena que corresponda aplicar por la comisión de otros delitos“.

¿Por qué evitar la publicidad falsa en tu empresa?

Una de las principales razones para evitar la publicidad engañosa en la empresa es evitar denuncias y posibles sanciones.

Por otro lado, el uso de este tipo de publicidad crea una mala imagen de la empresa, afectando negativamente a su reputación, no solo entre los consumidores, sino también entre organismos de control, administraciones públicas, socios o inversores.

En definitiva, la publicidad engañosa es una forma de hacer trampas en la promoción de productos o servicios. Puede que la primera vez salga bien, pero lo más probable es que a medio o largo plazo acabe teniendo consecuencias negativas para la empresa.