Aunque estamos más habituados a asociarlo con menores de edad o con figuras más o menos públicas, cualquier persona, independientemente de su edad o de si es anónima, puede ser víctima de acoso en redes sociales. En este artículo explicaremos en qué consiste el acoso a través de redes sociales, cómo prevenirlos y cómo denunciarlo.
En este artículo hablamos de:
El acoso en las redes sociales es un tipo de ciberacoso, entendiendo este como toda amenaza, hostigamiento, humillación o cualquier tipo de acción dirigida a molestar, dañar o humillar a una persona a través de las redes sociales.
Por lo tanto, pueden ser comentarios hirientes, insultos, una hipervigilancia de la víctima en el caso del stalkers (el acosador estará presente en todos las publicaciones que haga, en todos los hilos, en las publicaciones de sus amigos, etc.), publicación de fotos o vídeos comprometidos con el fin de avergonzar o degradar a la víctima, etc. Siempre de forma constante y sostenida en el tiempo.
En no pocas ocasiones, especialmente en entornos escolares, el acoso en redes sociales es una prolongación del acoso físico y real que sufre la víctima, convertido en ciberbullying, el acosado no puede escapar de sus acosadores en redes sociales, ya que las redes sociales permiten continuar con estas conductas todos los días, a todas horas.
El acoso u hostigamiento en redes sociales puede ocurrirle a cualquiera, tanto menores como a adultos, a personas conocidas o anónimas, y tomar diferentes caras, ya que puede emplearse para hacer daño, desacreditar a una persona y dañar su reputación, humillar, vengarse de alguien (muy habitual en exparejas con la denominada «venganza pornográfica») o acosar a una persona en el sentido más literal del concepto.
Podemos diferenciar distintos tipos de acoso en las redes sociales en función del objetivo y la intención del acosador:
- Acoso o bullying en sentido de amenazar, humillar, insultar a la víctima.
- Exclusión, cuando a la víctima se la aísla y deja de lado.
- Acoso o stalking en sentido de hipervigilar a la víctima, tener la creencia de que hay una relación entre ambos y seguirla por toda la Red (en ocasiones puede derivar en acoso físico).
- Acoso sexual a través de redes sociales, enviando imágenes no solicitadas o difundiendo imágenes privadas e íntimas sin consentimiento. Aquí también podríamos hablar de «venganza pornográfica».
El acoso es uno de los peligros de las redes sociales, especialmente para menores, aunque ya hemos visto que es igual de potencialmente dañino para los adultos. Sufrir acoso en redes sociales no es algo por lo que nadie quisiera pasar, en el mejor de los casos, las víctimas acaban abandonando las redes sociales y olvidándose del episodio, en el peor, y como ocurre con el acoso en la vida real, las víctimas pueden acabar sufriendo diferentes consecuencias, como depresión, baja autoestima, problemas de confianza, daños a su imagen y reputación, incluso conducir al suicidio (especialmente en menores, pero no solo en ellos).
Pero eso no quiere decir que estemos indefensos ante estas prácticas nocivas, porque podemos detenerlas. Empezando por saber cómo prevenir el acoso en las redes sociales, para lo que os dejamos una serie de consejos que podéis poner en práctica:
- No respondas a los insultos o provocaciones de un acosador, solo escalarán la situación y lo volverán más agresivo, incluso intentará hacer ver que él es la víctima.
- Bloquea a los usuarios que te insulten o hagan comentarios por los que puedas sentirte ofendido o mal. Y denuncia su perfil en la plataforma.
- No aceptes solicitudes de amistad de desconocidos.
- Crea perfiles privados que solo puedan ver tus amigos o contactos o, en caso de no poder hacerlo, configura siempre los ajustes de privacidad de tu perfil lo máximo posible.
- No compartas información privada en redes sociales que no quieras que se haga pública. Esto incluye también las fotografías o vídeos comprometidos. No se trata de ser unos desconfiados, pero sí de ser precavidos.
- No participes en campañas de acoso a otras personas y denuncia tales actitudes.
Finalmente, prevenir el acoso en redes sociales también pasa por la educación y la concienciación sobre las consecuencias y daños que tiene el ciberacoso, tanto para las víctimas como para los acosadores, porque el acoso es un delito tipificado el Código Penal (artículos 172 ter y 197.7), castigado con pena de prisión de tres meses a dos años de cárcel y multa de seis a 24 meses.
Aparte de prevenir el acoso en redes sociales, si sufrimos comportamientos o acciones de este tipo, también podremos denunciarlas, puesto que si se cumplen los requisitos que establece los artículos 172 ter y 197.7 del CP, estaríamos ante un delito de acoso. En este caso, además, la policía recomienda denunciar lo antes posible (y no eliminar ninguna prueba, es decir, no borrar perfiles, mensajes, imágenes, etc., ya que ayudarán en la investigación y la localización e identificación del acosador, en caso de que este utilice perfiles falsos).
Aunque antes de dar el paso y acudir a denunciar el acoso en redes sociales a la policía, podemos empezar denunciándolo en las propias redes. La mayoría de redes sociales cuentan con recursos y mecanismos para denunciar a otros usuarios que nos pueden estar acosando, tal y como podemos ver en las secciones de ayuda de Facebook, Twitter o Instagram.
Las injurias y calumnias, que son muchas veces la base de ciertos tipos de acoso en redes sociales, también son delitos recogidos en el Código Penal y que podemos denunciar, tal y como os contamos en cómo hacer una denuncia por difamación en redes sociales.
Si además, el acosador ha difundido imágenes privadas sin nuestro consentimiento, también podremos denunciar por revelación de secretos y vulneración de nuestro derecho al honor y la propia imagen.
Aunque el anonimato que brindan las redes sociales pueda hacernos pensar que es difícil frenar el acoso en estas y perseguir a los acosadores, lo cierto es que es posible dar con dichos acosadores y terminar llevándolos ante la justicia. Explicamos cómo a continuación.
- Primero, identifica las conductas de acoso social:
El primer paso es identificar las conductas de acoso en redes sociales; un insulto o «broma» de mal gusto puntual hecha por otro usuario no implica que estemos ante una situación de acoso.
Hablamos de acoso en redes sociales cuando otro usuario, que puede ser un completo desconocido o alguien cercano a nosotros, se dedica a insultarnos continuamente, meterse con nuestro aspecto físico o de nuestra vida privada, trata de humillarnos, manipula a otra gente para que nos ataque o ignore, difunde calumnias sobre nosotros, es decir, miente sobre cosas que hemos hecho supuestamente, etc.
También hablamos de acoso cuando un usuario está continuamente vigilándonos en redes sociales, comenta todas nuestras publicaciones y en las publicaciones de amigos o conocidos en las que podamos aparecer, exige nuestra atención, nos envía mensajes privados o correos electrónicos continuamente, se vuelve agresivo cuando lo ignoramos, etc.
En el caso del grooming, se trata de un tipo de acoso que comienza con el acosador ganándose la confianza de su víctima para que esta le envíe imágenes comprometidas, normalmente de índole sexual, con las que luego podría chantajearle para conseguir más imágenes o un contacto en la vida real.
Sin llegar a ser grooming, también hay acosadores que primero se ganan la confianza de sus víctimas, para que estas compartan información privada con ellos, que después usarán para chantajearlos o humillarlos al publicarla en redes sociales.
- Segundo, reúne pruebas:
Aunque más arriba hemos indicado que una solución para poner fin al acoso en redes sociales es bloquear a los acosadores, antes de hacerlo, es recomendable reunir todas las pruebas que podáis del acoso; capturas de pantalla, textos, mensajes públicos y privados, imágenes y videos de contenidos cuestionable que os haya podido enviar, registro de posibles amenazas, etc.
Se trata de documentar todas las pruebas que reflejen el acoso que estamos sufriendo, que a través de un perito informático o testigos online podremos certificar.
- Tercero, denúncialo:
Una vez hayamos reunido todas las pruebas necesarias, el siguiente paso es la denuncia del acoso por redes sociales ante las autoridades. Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado cuentan con unidades de delitos telemáticos que investigan estos casos de acoso y pueden acabar descubriendo quién es nuestro acosador (en caso de que no lo sepamos) y llevarlo ante la justicia. Como hemos dicho, hay ciertos tipos de acoso que son delito y están penados con multas y condenas de prisión, en función de la gravedad.
Todos estos pasos también son aplicables en caso de acoso escolar en redes sociales o de otro tipo a menores, pero en este caso es fundamental que los padres estén atentos a las posibles señales que muestran las víctimas de acoso, como puede ser el estrés, los cambios de humor, la depresión, la baja autoestima, etc.
En definitiva, la ley española tipifica el acoso como delito y esto incluso el acoso en redes sociales, por lo que si te encuentras en esta desagradable situación, no dudes en denunciarlo, tanto en la propia plataforma como ante la policía.